El equipo de James Rodríguez y Luis Díaz arruina la fiesta peruana con un gol en el tiempo de descuento
La emoción y la tensión de las Eliminatorias Sudamericanas 2026 volvieron a apoderarse del estadio Nacional de Lima, donde la selección de Colombia logró arrebatarle un empate 1-1 a Perú en los últimos instantes del partido. Este resultado, además de ser un golpe psicológico para el equipo peruano, los deja con una herida profunda de cara a su próximo enfrentamiento con Ecuador.
El sueño de Perú, roto en el último suspiro
La noche en Lima estaba lista para una celebración peruana. Bajo la dirección del experimentado Jorge Fossati, los locales parecían tener en sus manos un triunfo que los hubiera impulsado en la tabla de clasificación. Durante gran parte del encuentro, los peruanos lograron contener la ofensiva colombiana y mantener la esperanza de una victoria que parecía segura.
Desde el arranque del partido, Colombia mostró su intención de tomar el control del juego. Con un fútbol dinámico y agresivo, los cafeteros, liderados por James Rodríguez en la creación y Luis Díaz en el ataque, presionaron al equipo peruano. Sin embargo, a pesar de su dominio, no lograron traducir su superioridad en goles durante los primeros 45 minutos. Perú, por su parte, se mantuvo firme en defensa y apostó por el contragolpe, pero sin mucha claridad en los últimos metros.
Perú se adelanta, pero no sabe cerrar el partido
En el segundo tiempo, la selección peruana cambió su enfoque. Jorge Fossati ajustó su táctica, optando por un fútbol más práctico y directo, dejando atrás el juego de posesión que había caracterizado su primer tiempo. Este cambio de estrategia dio resultados a los 68 minutos, cuando Alexander Callens, con un certero remate de cabeza, puso el 1-0 que hizo explotar de júbilo a los hinchas en el estadio Nacional.
El gol de Callens fue un bálsamo para un equipo que venía sufriendo la presión de la ofensiva colombiana. A partir de ese momento, Perú se replegó, dispuesto a defender con uñas y dientes un resultado que parecía crucial para sus aspiraciones mundialistas. La celebración se apoderó de la capital peruana, pero faltaba la parte más difícil: mantener la ventaja hasta el final.
El golpe letal de Colombia en el descuento
Colombia no bajó los brazos. El técnico cafetero movió sus piezas y lanzó a su equipo al ataque, buscando el empate a como dé lugar. Y fue en el tiempo de descuento cuando el esfuerzo finalmente rindió frutos. En una jugada rápida, James Rodríguez tomó el balón cerca del área y, con un pase preciso, habilitó a Luis Díaz, quien no perdonó. El delantero del Liverpool sacó un disparo certero que dejó sin opciones al arquero peruano, estableciendo el 1-1 definitivo.
El gol de Díaz fue un balde de agua fría para los peruanos, que vieron cómo se esfumaba la victoria en el último minuto. Para Colombia, el empate significó un alivio y un impulso moral de cara a los próximos desafíos en las eliminatorias. Por otro lado, para Perú, fue un golpe devastador que no solo afectó su posición en la tabla, sino también la moral del equipo.
¿Cómo afecta este resultado el próximo duelo contra Ecuador?
El empate ante Colombia deja a Perú en una situación delicada. La selección de Jorge Fosatti no solo perdió dos puntos vitales en casa, sino que también mostró fragilidades que La Tri seguramente analizará y buscará explotar en su próximo enfrentamiento. Ecuador, por su parte, verá en este duelo una oportunidad de oro para sumar puntos y seguir escalando en la clasificación.
El duelo entre Perú y Ecuador se perfila como uno de los más emocionantes de la próxima jornada. Los ecuatorianos, liderados por su joven estrella Moisés Caicedo y la experiencia de Enner Valencia, saben que una victoria en Lima podría ser clave para sus aspiraciones mundialistas. Mientras tanto, Perú deberá recuperar rápidamente la moral y ajustar su estrategia si quiere mantener vivas sus esperanzas de clasificación.
Una eliminatoria sudamericana impredecible
Las eliminatorias sudamericanas para el Mundial de 2026 están demostrando una vez más por qué son consideradas las más difíciles del mundo. Con selecciones tan competitivas, cada partido es una batalla y ningún resultado está garantizado. Colombia y Perú lo demostraron en Lima, en un encuentro lleno de emociones, donde el fútbol nos recordó una vez más su capacidad para sorprendernos.
La próxima jornada promete más emociones y, para Perú, será una prueba de fuego. Necesitan recuperarse rápido, ajustar sus errores y salir a buscar una victoria ante Ecuador que los mantenga en la lucha. La Tri, por su parte, espera capitalizar el mal momento de los peruanos y seguir soñando.