Un cierre explosivo en la LigaPro deja más preguntas que respuestas entre Emelec y Deportivo Cuenca
El duelo entre Deportivo Cuenca y Emelec en el estadio Alejandro Serrano Aguilar parecía terminar como una batalla táctica más de la Fecha 9 de la LigaPro, pero lo que ocurrió en los últimos minutos cambió el tono del partido… y quizás algo más que eso.
Con un solitario gol que le dio el triunfo a los azules, el marcador final no fue lo único que capturó la atención. Las emociones se desbordaron cuando Emelec se quedó con nueve jugadores en cancha: Joao Quiñónez vio la segunda amarilla al minuto 84, y Romario Caicedo fue expulsado tres minutos después tras cortar una jugada que pudo terminar en el empate del Cuenca.
Y ahí comenzó el verdadero caos.
Lo que parecía una simple reacción desde los banquillos se transformó en un enfrentamiento directo entre los cuerpos técnicos. El cruce de palabras y empujones encendió el ambiente en los alrededores del campo, obligando a la policía a intervenir para separar a los protagonistas.
Aunque no hubo más sanciones en ese momento, este episodio dejó una sensación incómoda entre los hinchas y una imagen tensa entre ambos clubes. En la previa, poco hacía presagiar un final tan caliente y cargado de tensión, lo que solo aviva la rivalidad y plantea dudas sobre posibles sanciones adicionales de la LigaPro.
Lo cierto es que el Bombillo se llevó tres puntos de oro, pero a costa de una noche cargada de nerviosismo. ¿Fue solo calentura del momento o hay heridas más profundas entre estos equipos?