Edison Gruezo Debuta con Gol y Aucas Agudiza el Mal Momento de los Militares
El fútbol ecuatoriano no da respiro, y este domingo los hinchas de El Nacional se fueron del estadio con las manos vacías otra vez. Un Aucas práctico y letal se llevó los tres puntos de Quito con un 1-0 que tuvo como protagonista a un nombre nuevo: Edison Gruezo, un chico de 17 años que debutó en primera con un golazo. ¿El resultado? Los Militares siguen sin ganar en LigaPro 2025 y la crisis parece no tener fin. ¿Qué está pasando con el Bi-Tri?
El partido fue un reflejo del momento que vive cada equipo. El Nacional, dirigido por Omar Asad, lució perdido, sin ideas ni chispa. Antes, el técnico podía colgarse del argumento de que, al menos, jugaban bien por momentos. Pero esta vez, ni eso. Los locales intentaron, cambiaron piezas, pero nada funcionó. Aucas, en cambio, no necesitó alardear: se paró firme atrás y esperó su chance. Y vaya que la aprovechó.
Corría el minuto 59 cuando Gruezo, que había entrado en el entretiempo por Michael Carcelén, recibió un pase preciso de Cristopher Zambrano, otro canterano que le cambió la cara al ataque oriental. El juvenil no dudó: sacó un remate potente que dejó sin chances a David Cabezas, el arquero militar. Gol, victoria y un debut soñado para el pibe de 17 años que ya empieza a sonar entre los aficionados.
Para El Nacional, este nuevo golpe los hunde en el puesto 14 de la tabla con apenas dos puntos y un -3 en diferencia de gol. La próxima parada no pinta fácil: recibirán a Orense en Quito buscando, al menos, romper la racha. Aucas, por su parte, trepa al sexto lugar con ocho unidades y un +2 que los pone a soñar. Su siguiente desafío será medirse a Independiente del Valle en Chillogallo, un duelo que promete.
Mientras los hinchas de los Orientales celebran a sus promesas, en El Nacional la preocupación crece. ¿Podrá Asad encontrar la fórmula para salir del pozo? ¿O seguirá el Bi-Tri dando tumbos? La LigaPro no perdona, y los seguidores ecuatorianos ya están ansiosos por ver cómo sigue esta historia.
