El fútbol ecuatoriano vibra con el reencuentro de dos entrenadores que marcaron historia. Beccacece prepara a La Tri con respeto hacia Gustavo Alfaro, DT de Paraguay, en un duelo clave de Eliminatorias.
El fútbol ecuatoriano no solo se vive en la cancha, también en las historias que lo rodean. Este jueves 4 de septiembre, La Tri —ya clasificada al Mundial 2026— visitará a Paraguay en Asunción. El partido, más allá de lo deportivo, tiene un condimento especial: el cruce entre Sebastián Beccacece y Gustavo Alfaro, un técnico que dejó huella en Ecuador y que ahora busca llevar a la Albirroja a la Copa del Mundo.
Beccacece reconoce la herencia de Alfaro
En diálogo con Diario Olé, Beccacece no dudó en elogiar a su colega argentino. “Gustavo es una persona muy querida por la gente del Ecuador. Ha dejado su huella y eso es muy importante para un entrenador”, destacó. Recordó además el cariño del público ecuatoriano hacia Alfaro cuando volvió a Quito en 2024, un gesto que habla de su legado.
Beccacece, sin embargo, deja claro que su proyecto tiene sello propio: darle espacio a los jóvenes y construir una identidad distinta, sin olvidar el camino que Alfaro inició. “Nosotros buscamos nuestra propia identidad, pero valoramos mucho lo que ya estaba hecho”, afirmó.

Un duelo con sabor especial
El cruce entre Paraguay y Ecuador no solo enfrenta a dos selecciones, sino también a dos filosofías. Beccacece nunca ha logrado vencer a Alfaro en Eliminatorias, algo que él toma como un desafío interesante. “No juega un entrenador, juegan los futbolistas. Nosotros solo somos un complemento”, explicó con humildad.
El antecedente más reciente fue en octubre de 2024 en Quito, cuando La Tri y la Albirroja igualaron 0-0 en un partido cargado de emociones. Ahora, Paraguay llega con la presión de asegurar su boleto al Mundial, mientras que Ecuador busca seguir fortaleciendo su solidez de cara al 2026.
El fútbol ecuatoriano vive un capítulo emocionante en estas Eliminatorias. Beccacece ha sabido continuar el trabajo de Alfaro, pero con su propio estilo. El reencuentro en Asunción promete ser más que un simple partido: será la muestra de cómo los entrenadores dejan huellas distintas, pero complementarias, en la historia de La Tri.