Desde la educación hasta la formación humana: conoce cómo Independiente del Valle transforma jóvenes promesas en estrellas del fútbol ecuatoriano e internacional.
Si hay un equipo que revolucionó el fútbol ecuatoriano en la última década, ese es Independiente del Valle. Pero más allá de sus títulos, lo que más impresiona es su cantera, una auténtica fábrica de talentos que no deja de exportar estrellas al mundo. ¿Cuál es su secreto? Martín Anselmi, extécnico del club y actual entrenador argentino, lo cuenta todo.
El modelo IDV: más que fútbol, una comunidad formativa
Durante una entrevista con el periodista Juan Pablo Varsky, Anselmi —campeón con IDV de la Copa Ecuador, la Sudamericana y la Recopa— explicó por qué el club es mucho más que una institución deportiva. “No pasa de casualidad todo lo que sucede en Independiente del Valle. Hay un trabajo integral que forma personas antes que futbolistas”, destacó.
Y es que el club tiene un modelo de convivencia único: 150 chicos viven, estudian y entrenan en el mismo lugar, formando una verdadera comunidad. “Desayunan juntos, estudian, entrenan y vuelven a estudiar. IDV les da todo: la mejor educación del país, formación integral y una metodología pedagógica impresionante”, señaló el DT argentino.
Un proyecto que trasciende los títulos
Anselmi fue enfático al decir que lo de IDV no es casualidad. “Cada vez se van más jugadores… pero también cada vez mejor formados”, recalcó. Esa formación integral —que combina lo académico con lo deportivo— es lo que ha permitido al club ser reconocido como la mejor cantera del fútbol ecuatoriano.
«IDV es mi casa», confesó emocionado. “Voy a ser parte de Independiente del Valle toda mi vida”.
Un modelo a seguir en toda Sudamérica
El éxito de IDV no solo se mide en títulos o ventas millonarias, sino en cómo ha transformado la vida de cientos de jóvenes ecuatorianos. Un proyecto que inspira, emociona y demuestra que con visión, compromiso y valores, el fútbol puede cambiar realidades.