El técnico de LDU, Pablo Sánchez, revela cómo afrontó las dudas de su entorno y logró ganarse a la exigente hinchada del Rey de Copas.
Pablo ‘Vitamina’ Sánchez, actual director técnico de Liga Deportiva Universitaria (LDU), ha experimentado el fútbol de una manera que pocos entrenadores logran. Desde el principio, sabía que dirigir a un equipo de la talla del Rey de Copas no sería fácil, pero aún así decidió aceptar el reto. Lo que quizás no esperaba era la advertencia de su esposa cuando la oferta llegó: «¿Estás seguro de ir a LDU? ¡Mirá que no te quiere nadie!»
Estas palabras, lejos de desanimarlo, se convirtieron en una motivación extra para el argentino, quien con trabajo duro y un buen manejo de grupo ha logrado revertir la percepción de los aficionados. Hoy, después de una eliminatoria dura en la Copa Sudamericana y con el equipo en la cima de la segunda etapa de la Serie A ecuatoriana, Pablo Sánchez se siente respaldado y en pleno control de un club grande.
Una hinchada difícil, pero apasionada
No es un secreto que la hinchada de LDU es una de las más exigentes del fútbol ecuatoriano. Pablo Sánchez lo sabía antes de llegar, pero vivirlo de primera mano fue una experiencia completamente diferente. «Yo encontré una hinchada muy exigente en LDU, eso es de equipo grande», comentó Sánchez en una reciente entrevista con radio La Red. «Al principio fue complicado, pero hoy la gente está contenta», añadió, destacando la montaña rusa emocional que implica ser el técnico de un equipo con tanta historia y tradición.
La presión era doble: no solo debía cumplir con los altos estándares del club, sino también cambiar la percepción de aquellos hinchas que inicialmente no veían con buenos ojos su llegada. «Mi trabajo será tratar de revertir eso», le dijo a su esposa al tomar la decisión de aceptar el reto. Y vaya que lo ha hecho.
Del escepticismo al éxito en el campo
Los primeros días en LDU no fueron fáciles para ‘Vitamina’. Llegar a un equipo que había sido eliminado de la Copa Sudamericana y que estaba bajo la lupa constante de la prensa y los aficionados no es el escenario ideal para ningún entrenador. Pero Sánchez se mantuvo firme. Con una mezcla de paciencia, estrategia y carisma, ha logrado colocar al equipo en lo más alto de la tabla de la Serie A, lo que ha comenzado a ganarle la simpatía de la afición.
Uno de los momentos más gratificantes para él fue la goleada 3-0 sobre Barcelona SC, donde vivió un ambiente que describe como único: «Lo que viví el otro día con BSC fue muy lindo», dijo Sánchez, agradeciendo el apoyo de la hinchada. Para él, la conexión con el público es clave: «Cuando la gente está positiva, en la cancha se siente un montón. Y cuando está negativa, también». Por eso, hace un llamado constante a los aficionados a seguir apoyando al equipo en los momentos más difíciles.
El desafío de entrenar a un gigante
Aceptar el desafío de dirigir a LDU no fue una decisión tomada a la ligera. Consciente de las expectativas, Pablo Sánchez sabía que tendría que ganarse el respeto y el apoyo de una hinchada que no perdona errores. «La gente es exigente en LDU y lo tengo claro», comentó, recordando las primeras semanas cuando el escepticismo estaba en su punto más alto.
Para un equipo como Liga, no basta con ganar partidos; la exigencia va mucho más allá. Los hinchas quieren un equipo que juegue bien, que luche por títulos y que mantenga la identidad que ha hecho de LDU uno de los clubes más grandes de Ecuador. Pablo Sánchez lo entendió desde el primer día y ha trabajado incansablemente para cumplir con esas expectativas.
El camino hacia el éxito: paciencia y trabajo duro
Aunque el recorrido ha tenido altos y bajos, Pablo Sánchez se muestra más que satisfecho con lo que ha logrado hasta ahora. «Estoy más que feliz por el momento», aseguró el técnico, destacando el compromiso de sus jugadores y el apoyo que ha recibido del club y la afición.
Para él, el fútbol es un constante sube y baja, y lo importante es estar preparado para todo. Así lo ha demostrado en su tiempo al frente de LDU, donde ha manejado tanto la presión externa como la interna con gran habilidad. Y aunque sabe que los desafíos aún no terminan, Pablo Sánchez está listo para seguir escribiendo su historia en el club.
La historia de Pablo ‘Vitamina’ Sánchez con Liga Deportiva Universitaria es un ejemplo de perseverancia y confianza en uno mismo. A pesar de las dudas iniciales, tanto de su entorno como de la hinchada, el técnico argentino ha logrado consolidarse como el líder del equipo y demostrar que tiene lo necesario para triunfar en uno de los clubes más grandes de Ecuador. Hoy, con LDU en la cima de la Serie A, el futuro se ve prometedor para Sánchez y su equipo. Y, como él mismo dice, «en el fútbol subís y bajás», pero lo importante es estar siempre preparado para cualquier desafío.