La polémica salida de Pinos y la llegada de Adrián Bone para proteger el arco del Ponchito
El panorama de Mushuc Runa ha dado un giro inesperado en cuestión de días. Lo que parecía una temporada bajo control se transformó en un drama que ha dejado a los hinchas boquiabiertos y al equipo con una crisis bajo los tres palos. La lesión de Adonnis Pabón y la posterior separación de Jorge Pinos por indisciplina dejaron al equipo en una situación delicada. Pero el club no tardó en reaccionar, fichando a un arquero con experiencia y trayectoria: Adrián Bone.
Una temporada marcada por la incertidumbre
Mushuc Runa había encontrado estabilidad en el arco con la llegada de Éver Hugo Almeida como entrenador. Bajo su mando, Adonnis Pabón se ganó la titularidad, ofreciendo seguridad en la portería. Sin embargo, el destino le jugó una mala pasada a Pabón. En un acto de violencia que sacudió al fútbol ecuatoriano, el arquero fue baleado durante un asalto, una tragedia que lo dejará fuera de las canchas por el resto de la temporada. La bala que atravesó su fémur no solo truncó su temporada, sino que también dejó a Mushuc Runa con un hueco difícil de llenar en el arco.
Ante esta situación, muchos esperaban que Jorge Pinos, el experimentado arquero del equipo, tomara la posta. Sin embargo, las decisiones del cuerpo técnico tomaron un rumbo diferente, eligiendo al juvenil Cristian Tapia para enfrentar a Emelec. Esta decisión desató la furia de Pinos, quien no ocultó su malestar, lo que llevó a su separación del equipo principal.
La controversia que sacudió el vestuario
El descontento de Pinos no pasó desapercibido, y el presidente vitalicio de Mushuc Runa, Luis Chango, no dudó en tomar cartas en el asunto. En declaraciones a Radio Ambato, Chango fue claro sobre la situación: “Jorge se enojó con el DT porque no iba a ser titular ante Emelec”. El presidente respaldó firmemente la decisión del técnico Almeida, subrayando la importancia del respeto y la disciplina en el equipo.
«Su actitud no es la adecuada, debe respetar. Espero que se disculpe, caso contrario, tendré que finiquitar con el jugador», sentenció Chango, dejando claro que en Mushuc Runa no hay espacio para la indisciplina. Con la decisión de apartar a Pinos del primer equipo, el club dejó un mensaje contundente sobre la importancia del comportamiento profesional.
La llegada de Adrián Bone: experiencia al servicio de Mushuc Runa
En medio de esta turbulencia, Mushuc Runa actuó rápidamente para cubrir el vacío en su portería. La solución llegó en la figura de Adrián Bone, un arquero con un extenso recorrido en el fútbol ecuatoriano. Con 35 años, Bone ha pasado por clubes de renombre como Aucas, Deportivo Quito, El Nacional, Independiente del Valle, y Emelec, entre otros.
Su incorporación no solo aporta experiencia, sino también la calma que Mushuc Runa necesita en estos momentos. Aunque en su último paso por Técnico Universitario no tuvo mucho protagonismo, Bone llega con el hambre de recuperar su mejor nivel y demostrar que aún tiene mucho que ofrecer en la Serie A.
Un arquero de Mundiales
La trayectoria de Adrián Bone incluye un hito que pocos futbolistas ecuatorianos pueden presumir: haber sido parte de la selección que disputó el Mundial de Brasil 2014. Aunque no llegó a jugar, estar entre los 23 convocados por la Tricolor es un reflejo de su calidad y de la confianza que los entrenadores han depositado en él a lo largo de su carrera.
Con Mushuc Runa, Bone tendrá la oportunidad de volver a ser protagonista, esta vez bajo la dirección de Éver Hugo Almeida, un entrenador que sabe cómo sacar lo mejor de sus jugadores. Los desafíos no serán pocos, pero Bone está acostumbrado a la presión y sabe que esta es una oportunidad crucial para revitalizar su carrera.
El futuro de Jorge Pinos: ¿una segunda oportunidad?
Mientras Adrián Bone se prepara para asumir la responsabilidad en el arco de Mushuc Runa, el futuro de Jorge Pinos sigue siendo incierto. Luis Chango dejó una puerta abierta para la reconciliación, pero el mensaje es claro: el respeto y la disciplina son innegociables.
Pinos tiene dos opciones: aceptar su relegación a la Sub 19 o pedir disculpas y esperar una segunda oportunidad en el primer equipo. En cualquier caso, su historia en Mushuc Runa parece estar en un punto crítico, donde solo el tiempo y sus acciones determinarán el desenlace.
Un equipo que mira hacia adelante
Mushuc Runa ha demostrado que, a pesar de las adversidades, está dispuesto a tomar decisiones firmes para mantener el orden y la competitividad en su plantilla. La llegada de Adrián Bone es una apuesta por la experiencia y la seguridad en un momento en que el club más lo necesita. Los próximos partidos serán una prueba de fuego para el Ponchito, que buscará cerrar la temporada con la frente en alto y, por qué no, con nuevas metas alcanzadas.