El delantero ecuatoriano Tin Angulo no superó los chequeos médicos y su llegada al Bombillo está en riesgo. ¿Qué pasará con uno de los grandes nombres del fútbol ecuatoriano en el extranjero?
En un país donde el fútbol se vive con el corazón, cada fichaje genera ilusión. Y cuando se trata de un nombre como José “Tin” Angulo, la expectativa se multiplica. El delantero ecuatoriano, que venía de un paso por Unión de Santa Fe en Argentina, fue presentado con bombos y platillos como el refuerzo número 11 de Emelec. La foto junto al presidente Jorge Guzmán parecía sellar la historia… pero nada está dicho todavía.
El problema médico que lo cambia todo
Según informó la periodista Gisella Buendía, Angulo no superó al 100% los exámenes médicos realizados por el club. El motivo: una antigua lesión en su rodilla izquierda, por la que fue operado a inicios de este año. Se trató de una meniscectomía artroscópica, según el parte médico difundido en su momento por el club argentino.
Aunque el delantero cumplió con un proceso de recuperación y terapia, el diagnóstico actual deja dudas sobre su estado físico. Emelec, hasta ahora, no ha emitido un comunicado oficial, pero la posibilidad de que el pase se caiga es real.
¿Qué significa esto para el Bombillo?
Emelec había apostado fuerte por reforzar su ataque para el segundo semestre del 2025, y “Tin” Angulo era una pieza clave. Su posible baja no solo afectaría los planes del club, sino que también pone en evidencia las dificultades que enfrentan muchos jugadores ecuatorianos en el extranjero al regresar al país: lesiones, cargas físicas, y la presión del entorno.
Esta situación también abre un debate sobre la importancia de los chequeos médicos en el fútbol ecuatoriano y el nivel de exigencia que los clubes deben mantener para proteger tanto su inversión como la salud de los jugadores.

Una decisión que puede marcar el semestre
El caso de José Angulo es una historia de expectativas, dudas y decisiones por tomar. ¿Seguirá en Emelec? ¿Buscará otro destino? Por ahora, solo queda esperar el informe médico oficial y la decisión final del club. Lo cierto es que el fútbol ecuatoriano sigue dando que hablar, dentro y fuera de la cancha.
