El Nacional emite un comunicado desconociendo la salida del jugador, quien fue anunciado como refuerzo de un club en Irak.
El fútbol ecuatoriano se ha visto sacudido por un hecho inesperado que involucra a Darío Pazmiño, el volante de El Nacional. El jugador fue anunciado como refuerzo del club iraquí Al-Talaba SC, lo que parecía ser un nuevo paso en su carrera. Sin embargo, la noticia tomó un giro drástico cuando el equipo de los Puros Criollos emitió un comunicado oficial desmintiendo su salida.
El documento, publicado en las redes sociales de la dirigencia que encabeza Marco Pazos, establece claramente que el club no ha recibido ninguna comunicación formal por parte de Pazmiño o su entorno sobre la finalización de su vínculo contractual. El comunicado también señala que El Nacional no tiene conocimiento oficial de su supuesto fichaje por otro club, lo que genera una situación de incertidumbre sobre el estatus del jugador.

Los motivos detrás de la controversia
Según se ha reportado, la raíz del conflicto podría ser una deuda que El Nacional mantendría con Pazmiño. La versión indica que el jugador se habría considerado libre tras el presunto impago de salarios, una situación que le permitiría rescindir unilateralmente su contrato. Este tipo de escenarios no son inéditos en el fútbol ecuatoriano, y han llevado a otros jugadores a tomar decisiones similares en el pasado.
El caso de Darío Pazmiño ha puesto en debate la gestión contractual y financiera de los clubes locales. A la espera de que se aclare la situación, los seguidores de El Nacional y del fútbol ecuatoriano se mantienen expectantes por la resolución de este conflicto.