El extremo ecuatoriano, figura de Barcelona SC en 2024, sueña con formar una dupla explosiva junto a Felipao en el año del Centenario del club.
Janner Corozo, una de las estrellas indiscutibles del Barcelona Sporting Club en 2024, está viviendo un momento de máxima ilusión. Con 29 años y tras una temporada brillante en la que marcó 18 goles y dio siete asistencias en 38 partidos, el extremo no solo mantiene la ambición personal de seguir brillando, sino que ahora sueña con la llegada de un título importante junto a su nuevo compañero, Felipe Caicedo.
El fichaje de Felipao, un delantero con vasta experiencia en Europa tras su paso por equipos como la Lazio y el Inter de Milán, ha reavivado la esperanza en los hinchas toreros. Este año, que marca el Centenario del club, los dirigidos por Barcelona SC tienen claro el objetivo: volver a levantar un trofeo, ya sea en la liga local o, por qué no, en la ansiada Copa Libertadores.
En una reciente entrevista con El Canal del Fútbol, Corozo no ocultó su emoción por la posibilidad de jugar al lado de Caicedo. «Espero tirar algunas paredes con Felipao. Con la trayectoria que tiene, todo el mundo quiere jugar con él. Es un honor compartir cancha con un grande de la Selección», confesó el extremo, quien también destacó el compromiso del equipo para alcanzar las metas trazadas.
Corozo y el desafío del Centenario
A pesar de no haber obtenido títulos en 2024, el desempeño de Corozo fue clave para mantener al equipo competitivo. Este 2025, el reto es aún mayor, y el jugador es consciente de ello: «Hay un muy buen equipo, han llegado refuerzos importantes. Para nosotros, quedar campeones de algo sería muy significativo. La hinchada pide la Libertadores, y nosotros vamos a luchar por cumplir ese sueño», aseguró.
Con la pretemporada en marcha, Corozo también mencionó que el trabajo físico ha sido intenso, pero el equipo ya se encuentra afinando detalles con el balón: «Esperemos que el año empiece con el pie derecho y con los objetivos claros».
En el año de su Centenario, Barcelona SC tiene la mira puesta en la gloria, y la dupla Corozo-Caicedo promete ser una de las grandes atracciones del fútbol ecuatoriano.
