Tras la caída ante Barcelona, Independiente del Valle se juega el todo por el todo frente a Universitario en Chillo Jijón.
Independiente del Valle no arrancó con buen pie su camino en la Copa Libertadores. La dura derrota bajo la lluvia en Guayaquil ante Barcelona dejó más que agua sobre mojado: dejó dudas, urgencias y una presión que ahora se siente en Chillo Jijón. Este martes 8 de abril, los rayados recibirán a Universitario de Perú en un partido que, más allá de la fase de grupos, ya tiene sabor a final.
Javier Rabanal, el DT español de los negriazules, lo dejó claro en la previa: “es obligatorio sumar en casa”. Y no es una frase hecha. El Grupo B no da tregua y perder puntos en Quito puede costar carísimo. Por eso, el equipo trabaja a contrarreloj, tratando de recuperar piernas cansadas y encender el chip táctico en cada sesión.

“No nos queda mucho tiempo para trabajar entre partidos. Hay que recuperar a los que más juegan y mantener frescos a los que entran”, confesó Rabanal, que viene de golear 4-0 a Deportivo Cuenca pero que ahora enfrenta un escenario muy distinto.
Las bajas siguen siendo una piedra en el zapato. Bryan García está descartado, Romario Ibarra sigue en duda, y tanto Jhegson Méndez como Richard Schunke arrastran molestias. La planificación es tan quirúrgica como el planteamiento táctico: dos grupos de trabajo, cargas divididas, y claridad en cada rol.
Del otro lado, Universitario llega con la misión de resistir. “Mientras estén con el empate, serán defensivos. Todos los que vienen acá lo son. Nosotros debemos tener paciencia”, advirtió Rabanal, consciente de que el rival buscará el contragolpe y las pelotas cruzadas.
A pesar de las ausencias, hay motivos para ilusionarse. El debut de jóvenes como Darwin y Jean Pierre Arroyo Vernaza entusiasma. Y en la Libertadores, como bien saben en Sangolquí, todo puede cambiar con un gol.