El presidente de Barcelona SC fue señalado por evitar a la hinchada tras el duro golpe ante Macará. ¿Estrategia de seguridad o falta de liderazgo?
El fútbol ecuatoriano no solo se vive en la cancha, también arde en los palcos. Tras la sorpresiva derrota de Barcelona SC ante Macará, las miradas no solo apuntaron al equipo, sino a su máximo dirigente: Antonio Álvarez, quien, según reportes, optó por ocultarse de la hinchada en el momento más crítico. ¿Qué pasó realmente?
La caída ante Macará fue un golpe inesperado para los toreros. Con el marcador 0-2 en contra, las ilusiones se apagaban y la frustración se apoderaba del Estadio Monumental. Mientras los jugadores intentaban recomponerse, las cámaras y los hinchas notaron una escena en el palco presidencial que encendió aún más el malestar.
Según reportes de medios y redes sociales, Antonio Álvarez se habría refugiado en su palco sin dar la cara, y posteriormente solicitó resguardo policial. Lo que podría interpretarse como una medida de seguridad fue, para muchos, una señal de cobardía y desconexión con la afición.
El presidente de #BarcelonaSC se fue a esconder después del 2do gol de Macará, ni siquiera tuvo la dignidad de dar la cara, en su lugar mando a la policía para que lo defienda. Hay que aprender a dar la cara en los malos momentos. Asco de Centenario. pic.twitter.com/7ftpwxnarc
— Ángel Barrera (@AngelBarre20) August 18, 2025
Barcelona SC es un club donde el fútbol se siente en la piel. Su hinchada es exigente, apasionada y leal, pero también demanda compromiso. Para ellos, ver al presidente evitar el contacto visual con la tribuna, mientras el equipo era derrotado en casa, fue un acto que rayó en la traición emocional.
La indignación creció rápidamente. Las redes sociales se llenaron de críticas, memes y reclamos. La imagen de un presidente que “se esconde” en lugar de enfrentar la situación ha generado una fuerte ruptura con parte de la afición, que exige transparencia y presencia en los momentos duros, no solo en las victorias.