El presidente vitalicio del Ponchito Luis Alfonso Chango habló tras el esperado triunfo ante Aucas y explicó por qué tuvo que corregir una decisión apresurada en la dirección técnica.
El fútbol ecuatoriano siempre regala historias cargadas de emoción, y Mushuc Runa acaba de escribir una que combina sufrimiento, autocrítica y esperanza. Después de 13 partidos sin ganar, el equipo de Echaleche volvió a sonreír al vencer 1-0 a Aucas en la LigaEcuabet. El resultado no solo representó la primera victoria con Paúl Vélez en el banquillo, sino también un renacer en casa, a 3.250 metros de altura.
El regreso a Echaleche y la voz de Luis Chango
Luis Alfonso Chango, presidente vitalicio del club, no ocultó su alegría tras el partido. Con tono emotivo, expresó la importancia de volver a jugar en el estadio indígena:
“Hoy retornamos, es muy significativo estar en un estadio en terreno indígena. Vuelve la fiesta a 3.250 metros, contentos de volver a nuestra casa”.
Pero más allá de la celebración, Chango sorprendió al reconocer un error directivo. Admitió que la llegada de Fabián Frías como entrenador no fue la mejor decisión:
“Personalmente me equivoqué en traer a otro profesor sin pensar dos veces. Tuvimos que corregir inmediatamente”.
Frías duró apenas dos partidos en el cargo, antes de que Vélez asumiera el reto de encaminar al Ponchito.
La apuesta por Paúl Vélez
El dirigente destacó que Vélez es un entrenador con experiencia y trayectoria en el fútbol ecuatoriano, capaz de darle identidad y orden al equipo. Aunque Mushuc Runa aún pelea en las últimas posiciones de la tabla, la directiva confía en que con trabajo podrán salir del fondo.
Chango también dejó claro que, pese a los malos resultados, el club ha cumplido con los jugadores y entrenadores en la parte económica, reforzando su compromiso con la estabilidad institucional.
El triunfo ante Aucas no es solo un alivio deportivo, sino también un recordatorio de que reconocer los errores y corregir a tiempo es parte de la grandeza de un proyecto. Mushuc Runa retoma la ilusión en su casa, y los hinchas del fútbol ecuatoriano estarán atentos a si este nuevo comienzo marca el camino hacia la permanencia.
