Antonio Valencia aún espera el pago completo por su paso por Liga de Quito. El club acepta la deuda y apunta a gestiones pasadas como responsables.
Cinco años han pasado desde que Antonio Valencia defendió los colores de Liga de Quito, y aunque su paso fue breve, sigue generando noticias. Esta vez, no por su rendimiento en la cancha, sino por una deuda que arrastra el club quiteño desde 2019. El «Toño» salió a hablar, la hinchada reaccionó, y la dirigencia respondió. ¿Qué está pasando exactamente?
En una entrevista con La Red, Eduardo Álvarez, dirigente de Liga, admitió abiertamente que el club mantiene una deuda con el histórico exjugador. Valencia, conocido por su carrera en el Manchester United y su compromiso con el fútbol ecuatoriano, ha sido paciente… muy paciente. Pero el tiempo se agota.
“A Toño lo único que puedo decirle es gracias por la paciencia que ha tenido. Esta deuda viene desde 2019”, declaró Álvarez.
Según el directivo, el club empezó a realizar abonos en 2023, pero actualmente hay un atraso en el convenio pactado. La buena noticia: prometen hacer un nuevo pago este lunes o martes, con el objetivo de cerrar completamente este capítulo durante 2025.
La dirigencia también señaló que la responsabilidad de esta situación recae en gestiones anteriores, aunque ahora asumen el reto de solucionar lo pendiente.
“Toño tiene todo el derecho a hablar y a exigir, porque es justo. Ha esperado casi cinco años por una deuda legítima”.

En medio de la actualidad del fútbol ecuatoriano, este caso pone sobre la mesa una realidad que enfrentan muchos clubes: las deudas con sus ídolos. Y si se trata de jugadores ecuatorianos en el extranjero que regresan al país, como fue el caso de Valencia, el tema toma aún más peso.
El «Toño» no pidió privilegios, pidió justicia. Liga ha dado señales claras de querer cumplir, pero el tiempo apremia. Esta historia es un recordatorio de que el fútbol ecuatoriano no solo se juega en la cancha, también se construye con respeto y responsabilidad fuera de ella.