El presidente canario rompe el silencio tras la caída ante Universitario y respalda públicamente a Segundo Castillo, comparándolo incluso con Guillermo Almada.
Barcelona SC regresó a Guayaquil con una derrota pesada sobre los hombros. No solo por el marcador, sino por lo que dejó ver el equipo en la cancha. La caída ante Universitario en Perú encendió las alarmas entre los hinchas, pero el presidente del club, Antonio Álvarez, decidió calmar las aguas… con palabras que no pasaron desapercibidas.
En medio de la tensión que se respiraba tras el arribo del plantel, Álvarez dejó clara su postura: el proceso de Segundo Castillo no está en duda. “Será técnico el tiempo que Dios quiera, que él quiera y que nosotros queramos”, dijo con un tono firme, apuntando directamente a los rumores que, según él, nacen de «gente malintencionada en redes sociales».
Lejos de dar señales de ruptura, el presidente duplicó su respaldo al Mortero, pidiendo respeto por los procesos y enfocando toda la atención en el próximo Clásico del Astillero. “Tuvimos un primer tiempo muy malo y un gran segundo tiempo. Hay que corregir, pero también hay que tener memoria”, añadió.
Y para reforzar su idea, soltó una comparación que no pasó desapercibida: “Con Guillermo Almada también tuvimos partidos horribles, le decían Alnada. Y miren ahora: es uno de los técnicos más queridos. A Segundo no se lo puede juzgar tan rápido”.

Aunque la autocrítica no faltó —reconociendo que el equipo está “complicado” y que hay cosas por corregir—, la dirección está clara: Castillo no se va. Al menos, por ahora.
Las palabras de Álvarez parecen ser una señal interna y externa. Interna, para el grupo que debe enfocarse en lo que viene. Y externa, para quienes ya hacían cuentas para reemplazar al DT. En tiempos donde la paciencia en el fútbol es escasa, Barcelona decide apostar por la estabilidad.