Alexandre Pallarés renunció como técnico de Macará tras una derrota y tensiones con la dirigencia
En Macará soplan vientos de cambio, y no precisamente desde lo táctico. La institución celeste de Ambato vuelve a ser noticia, pero esta vez no por su rendimiento en cancha, sino por una salida inesperada: la de su director técnico, el español Alexandre Pallarés.
La bomba explotó tras la derrota por 1-0 ante Deportivo Cuenca en el estadio Bellavista. Aunque el resultado ya era motivo de preocupación, la verdadera tormenta se gestaba puertas adentro. Pallarés, visiblemente incómodo con la situación interna del club, decidió dar un paso al costado. Según reportes de medios ambateños, su renuncia no se debe únicamente a los resultados deportivos, sino a tensiones directas con algunos funcionarios del club.
Lo más llamativo es que esta decisión ya venía cocinándose desde hace días. Incluso, se conoció que la directiva del Macará había intentado convencerlo de continuar, logrando momentáneamente frenar su salida. Sin embargo, la situación parecía insostenible y finalmente, tras el pitazo final frente al Cuenca, el técnico no quiso seguir más.
Pallarés, quien había llegado con la misión de devolverle protagonismo al equipo, optó por irse antes de ver comprometido su trabajo y principios. Un movimiento que, aunque sorpresivo, habla de un profesional que no está dispuesto a tolerar ambientes que no favorecen el rendimiento colectivo.
Ahora el panorama es incierto. Se espera que la dirigencia de Macará se pronuncie oficialmente en las próximas horas para aclarar el rumbo del equipo y anunciar posibles reemplazos. Mientras tanto, la hinchada celeste observa con preocupación cómo los conflictos internos terminan pesando más que los goles.
