La Mini Tri lo ganaba con autoridad, pero Brasil reaccionó y dejó a los nuestros al borde del abismo
Lo que parecía una noche de gloria terminó siendo un trago amargo. Con el boleto directo al Mundial en la mano, la Mini Tri dejó escapar una ventaja de 2-0 ante Brasil y terminó cayendo 3-2 en un partido que duele, y mucho. Ahora, la clasificación deberá buscarse en un angustiante play-off.
Una historia que empezó con esperanza…
Desde el pitazo inicial, Ecuador mostró hambre, actitud y personalidad. No era solo un partido más: era el pasaje directo al Mundial. Y los dirigidos por Juan Carlos Burbano lo sabían. Por eso salieron con el cuchillo entre los dientes, presionando alto y dominando a una Brasil irreconocible.
El primer golpe llegó al filo del descanso, cuando un centro de Quintero terminó en autogol de Luis Eduardo. La ventaja se amplió en el segundo tiempo con un penal bien cobrado por Justin Lerma. Un 2-0 que parecía inamovible.

…y terminó en pesadilla
Pero el fútbol, como tantas veces, fue cruel. En apenas tres minutos, el mismo Luis Eduardo se redimió con el descuento y Gustavo igualó el marcador. El golpe de gracia llegó al minuto 89, cuando Luis Gustavo selló la remontada. Ecuador quedó en shock. Del festejo al silencio absoluto.
¿Y ahora qué?
La Mini Tri, que lo tenía todo para celebrar la clasificación directa, ahora deberá disputar un repechaje que será a todo o nada. No hay margen para errores. Lo que pasó con Brasil debe servir de lección y no de peso extra en la mochila.