El ecuatoriano ingresó desde el banco para corregir una defensa desordenada y evitar una derrota en la Ligue 1.
El Paris Saint-Germain vivió un partido complicado frente al Reims, donde nuevamente las decisiones de Luis Enrique generaron polémica. Con un equipo mixto en el campo, los parisinos apenas lograron un empate 1-1 en un duelo que dejó más dudas que certezas. Sin embargo, la entrada de Willian Pacho al minuto 60 fue clave para evitar una catástrofe.
Un PSG con falencias y un Reims inspirado
Luis Enrique apostó por una alineación alterna, priorizando la rotación de jugadores antes de los compromisos internacionales. Esta decisión permitió al Reims dominar varios pasajes del encuentro y encontrar el gol que les dio ventaja parcial.
La defensa del PSG mostró serias debilidades, lo que obligó al técnico español a recurrir a Willian Pacho desde el banco. El ecuatoriano ingresó para ordenar una zaga desorientada y, aunque logró estabilizar la retaguardia, la ofensiva no estuvo a la altura para remontar el marcador.
Pacho, el pilar de la defensa
Desde su ingreso, Willian Pacho demostró por qué es uno de los defensores más confiables del PSG. Con su liderazgo y capacidad para leer el juego, logró cerrar los espacios que el Reims había explotado durante la primera hora del partido. Su actuación fue determinante para evitar que el rival ampliara la ventaja y permitió que el PSG encontrara el empate en los minutos finales.
A pesar de su destacada participación, quedó claro que el PSG depende en gran medida de su solidez defensiva, y las decisiones de Luis Enrique seguirán siendo objeto de debate.
Un partido para reflexionar
El empate ante Reims deja lecciones importantes para el PSG. Si bien la rotación es necesaria, las decisiones estratégicas deben ser cuidadosas, especialmente en una liga tan competitiva como la Ligue 1. La actuación de Willian Pacho refuerza su importancia en el esquema del equipo, pero también evidencia la necesidad de mantener un equilibrio en la alineación titular.